EL LENGUAJE

Saber utilizar el lenguaje es algo muy importante para poder tener unas buenas relaciones sociales. Expresarse, de forma adecuada, es una virtud que no todas las personas poseemos. Hablar expresando lo que sentimos, sin molestar a los ciudadanos que puedan escucharte, es esencial para evitar enemistades no deseadas. A pesar, que en la mayoría de las ocasiones, tratamos de sortear frases y palabras fuera de lugar no siempre lo conseguimos.

 

 La clase política, es un sector social, que está obligado ha dominar el lenguaje. Es su obligación pronunciarse, de forma moderada, para eludir ofensas de muy difícil reparación. Las palabras pronunciadas por el alcalde de la ciudad, Javier Maroto, con respecto al “clan de los bartolos” pertenecientes a la comunidad gitana, no han sido muy brillantes. Comparto con el regidor el hartazgo hacia los delitos, cometidos, presuntamente, por los bartolos. Pero tal vez sus palabras pueden haber tenido cierto poso discriminatorio. Dichos presuntos delincuentes son de raza gitana y por tanto señalalarles públicamente no cabe duda que no ayuda  a prestigiar a los calés.

 

El Alcalde ha sido algo impulsivo. El esfuerzo que desde este gobierno municipal y los que le han precedido le ha jugado una mala pasada, aunque comprensible. No por ello disculpo sus desafortunadas palabras, pero ha demostrado que el primer edil está a pie de la calle y  da respuesta lo que desde la ciudadanía se demanda.