CONTROL

No más quemaduras por zapatos tóxicos, tampoco juguetes peligrosos para los niños ni pastas dentífricas con componentes dañiños. El Ayuntamiento, a través del Departamento de Salud y Consumo (Demsac) y de los Bomberos, ha iniciado una campaña de control riguroso sobre los locales de 'todo a cien' y los bazares, muchos de origen asiático. Se calcula que hay más cuarenta establecimientos en el término municipal, y todos serán inspeccionados por técnicos municipales en busca de artículos nocivos o que vulneren la legislación vigente. La campaña, que acaba de arrancar, se prolongará hasta bien entrada la primavera.
El dispositivo municipal nace de una recomendación de la Junta de Seguridad, preocupada por la aparición de artículos defectuosos y alentado por quejas ciudadanas. De esta manera se refuerza un protocolo que ya acometían por separado el Demsac y los Bomberos. Desde hace unos días, efectivos de ambos organismos han llevado a cabo estas inspecciones «más exhaustivas».
En una primera fase han recogido objetos de tres bazares elegidos al azar. La lista incluye cazos, biberones, lacas, tuppers, sartenes y hasta sombras de ojos. Se trata, en todos los casos, de artículos susceptibles de incumplir la normativa vigente de la Unión Europea o de presentar materiales peligrosos para la salud. Esta remesa fue enviada al Centro de Investigación de Control de Calidad (CICC), organismo ubicado en Barajas, y dependiente del Ministerio de Sanidad. Allí, sus expertos analizan sus composición y estructura. Si el estudio no supera los controles los incluirán en una lista negra. Es decir, ordenarían su retirada de las estanterías.
A su vez, en una segunda tanda de registros, los efectivos municipales localizaron un nuevo grupo de objetos «decomisables» en otros tres establecimientos conocidos por sus precios populares. Esta vez incluyeron, entre otros, un spray, una bolsa de cámaras fotográficas o una espumadera.
Retirada de artículos
Cuando reciban los informes del CICC reactivarán los controles. «Comprobaremos las medidas de seguridad y la posible existencia de artículos peligrosos en todos los establecimientos censados», indican desde el Demsac.
En esas visitas, los Bomberos verificarán además si los establecimientos tienen la seguridad a punto. «Se estudia si los extintores cumplen con la ordenanza, si los pasillos están razonablemente libres o si no haya obstáculos en las salidas de emergencia». En 2009, por ejemplo, realizaron 35 inspecciones. Por su parte, los técnicos del Demsac se centrarán en los artículos potencialmente peligrosos. «Pertenecemos al servicio 'Redes de alerta', que te informa de productos que pongan en riesgo la salud del consumidor». Sus expertos, gracias a la denuncia de un vitoriano, también han incluido un objeto nocivo en este sistema de detección. Se trataba de una alargadera irregular con tendencia a los cortocircuitos.
Como se prevé una avalancha de decomisos, el Demsac ya ha solicitado la cesión de un almacén donde guardarlos y luego poder eliminarlos.